A los lectores de este blog les habrá sorprendido, supongo, que de buenas a primeras se exija, para poder escribir un comentario, que escriban su nombre, así como su correo electrónico. Esto tiene una explicación: Últimamente, entraban en este blog miles de mensajes -no exajero-, todos escritos en inglés y con textos que nada tenían que ver con lo que yo aquí escribía. Eran mensajes comerciales ofrenciendo todo tipo de mercancías, desde productos farmacéuticos hasta ideas para hacerse millonario en poco tiempo. En un principio traté de eliminarlos, pero eran tantísimos que se me hacía eterno; además, como son mensajes múltiples  enviados de forma atutomática, aguantaban más ellos a entrar que yo a borrar. Para evitar que me colapsaran el ordenador, no tuve más remedio que tomar esa medida.

Deseo aclarar, que quien quiera escribir, no necesita -si no lo desa- poner su nombre verdadero. Vale con poner un pseudónimo. En cuanto al correo electrónico, ateniéndome a la ley de protección de datos, garantizo que no será divulgado ni utilizado, bajo ningún pretexto.

También deseo aclarar, que borrando los mensajes mencionados, por falta de experiencia y sin pretenderlo, he borrado algunos de los escrito por vosotros. Os pido discupas. Nada más lejos de mi intención que borrarlos.

Piorno